Deseos

Diario de la cuarentena: las historias de todos

Conocer la mujer de 494763

Sino por el drama que viven los pacientes que, aun sin tener covid, sufren las consecuencias de la pandemia. Hoy me toca guardia en la unidad de hemorragia digestiva. Hasta el momento, no ha recibido tratamiento alguno. Se queja de dolor abdominal intenso, cansancio y dificultad para ingerir alimentos. Esperemos que no. Por la tarde he visto a otro paciente. Para mi sorpresa se trataba de un bebé de siete meses.

Capítulo I Propone su madre a Pedro Saputo que se case. Vaya, no puede ser, no estaría bien, es disparate pensarlo; mejor es lo que ahora usamos. Sí que ha pasado ya la juventud y se fue el color de rosa, y la viveza de los ojos y la lisura de la tez, y el aire y la amabilidad de los años de las gracias. Conque admitid la voluntad o alcanzadme licencia para serviros. Sino que es el albur que yo, como le quiero baza y era él tan vivo y diabólico de muchacho, siento que no lo sea siempre y hayamos de tratar de cosas tan formales como van a ser las que apuntan y siguen. No dejaba de creerse digna del mismo favor la hija de su madrina, porque era todavía muy amable, graciosísima, bonita, garbosa, entendida, aunque inocente, y un verdadero diamante labrado, y labrado por tales manos; y le quería mucho igualmente, habiéndola inclinado su misma madre al amor de Pedro Saputo con propósito de que la amistad de los padres se llegase a estrechar del todo con la unión de los hijos y quedasen las dos casas hechas una sola.

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